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Mis muñecas son una forma hermosa y única de expresar el amor hacia los más pequeños.
Pero la principal función de una muñeca es para jugar ya que ayudan en el desarrollo del juego simbólico, fomentar la creatividad y la imaginación, y son un gran estímulo para el lenguaje y la motricidad.
Las muñecas son grandes compañeras a la hora de irse a dormir, llevando calma y armonía al pequeña/o para conciliar el sueño. También funcionan como objeto de apego cuando los peques viven situaciones de cambios experiencias nuevas son un apoyo emocional importante.
Las muñecas también son una hermosa opción para decorar y darle calidez a una habitación ya que son muñecas que traen sentimientos positivos, seguramente duren poco tiempo decorando ya que invitan a ser abrazadas y mimadas, robándote una sorisa al verlas.
Los niños, igual que las niñas necesitan un “ compañero/a” para compartir sus alegrías y penas y una muñeca es una excelente candidata para para eso. ¡Las emociones no son cosa de niñas!
Brindándole herramientas para el futuro como hijo, como padre, amigo, etc.
Ya que está demostrado que jugando con muñecas se activan regiones del cerebro relacionadas con la empatía.
Las Pandoritas son para niños y adultos, en muchas terapias se usan para adultos mayores con el objetivo de mejorar su bienestar.
Y si estás pensando en autoregalarte una muñeca ¡es un rotundo SÍ! te aseguro no te arrepentirás, será un mimo a tu niña/o interior que muchas veces necesitamos reconciliar.
La Pandorita posee solo ojos para que la niña o niño pueda conectar con sus emociones jugando, si desea obviamente le dibujara en la cara los rasgos que se imagine, cada muñeca puede estar sonriendo, enojada, con cara de sorprendida, etc. según la circunstancia.
Cuando los detalles son minuciosos impiden esa plasticidad y así la capacidad de la presentación de la fantasía infantil, todo dependerá de sus vivencias al momento de jugar.
Cuanto menos definido los rasgos más permitirá la intervención del niño, buscando fomentar la creatividad e imaginación.
Si bien puede regalarse para decorar la habitación de un bebe, se recomienda a partir de los 3 años de edad.